El arroz blanco es una buena solución para acompañar muchos platos. Es un cereal sin glúten muy rico en proteínas vegetales ideal para comer con todo tipo de verduras y hortalizas. Por el sabor o para la salud, de todas maneras es importante que el arroz blanco tenga la cocción exacta. Mi truco es una doblE cocción, ahora os cuento.
Ingredientes:
(Para dos personas)
- Arroz basmati u otro arroz largo (pero no arroz «minuto»)
- 2 cebolletas pequeñas o 1 mediana
- Agua para hervir
- Agua muy fría con cubitos
- Sal
Preparación:
- Con la ayuda de un colador fino, los granos de arroz deben lavarse bien para retirar el almidón; se debe enjuagar con agua fría hasta que el agua sea totalmente transparente. Escurrir.
- Poner una cacerola u olla con abundante agua a hervir. El triple de agua que de arroz. Cuando el agua empiece a hervir, añadir una pizca de sal y el arroz lavado. Hervir durante 10 minutos a fuego medio.
- Con la ayuda de una espumadera, ir retirando el arroz de la cazuela, no estará cocido completamente y habrá líquido. Ir llenando un repiciente adecuado para cocer al vapor. El arroz no debe tener exceso de líquido sólo estar húmedo. Tapar bien y cocer al vapor durante 10 minutos. Pasado ese tiempo apagar la máquina y dejarlo reposar 10 minutos tapado en el mismo recipiente.
- Preparar agua helada en el congelador o asegurarse de tener hielos para añadirlos al agua. Habrá que enfríar las cebolletas inmediatamente después de hervirlas. Poner a hervir agua con una pizca de sal en un cazo pequeño. Lavar bien las cebolletas y conservar lo verde que esté mejor. Cortar la cebolleta en rodajas lo más finas posibles, toda la parte blanca y una parte del tallo verde, lo que esté más fresco. Cuando el agua rompa a hervir, debes tener preparada una fuente con el agua helada. Verter las cebolletas en el agua hirviendo, mantener sólo un minuto y retirarlas con la ayuda de una espumadera mediéndolas inmediatamente en agua helada. Dejarlas enfriar dos minutos y retirarlas del agua fría para que escurran. La cebolleta estará «casi» cruda y mantendrá un color verde brillante. La cocción hará más digestible la cebolleta y no tendrá un sabor picante fuerte.