El libro del doctor irlandés John Kelly “Stop feeding your cancer” (“Deje de alimentar a su cáncer”) no afirma conseguir la «cura» del cáncer. En su lugar, presenta pruebas convincentes, basadas en la experiencia de sus propios pacientes, que muestran que se puede detener el avance del cáncer e incluso revertirlo a un estado inactivo gracias a un cambio en la dieta, consiguiendo así que las personas que lo sufren recuperen una buena salud y lleven una vida normal.
La base de su tratamiento es el descubrimiento, hace una década, de una relación directa entre el consumo de proteínas de origen animal y el desarrollo de cáncer. Las células cancerosas necesitan proteínas para dividirse y florecer. Cortar el suministro de proteína animal puede detener el crecimiento y la propagación de las células cancerosas, lo que puede matar de hambre a las células cancerígenas.
El Dr. Kelly no reclama haber hecho ningún descubrimiento sobre el cáncer. De hecho, su enfoque se basa en los hallazgos en otro libro, “El estudio de China”, del prestigioso investigador y nutricionista T. Colin Campbell, de la Universidad de Cornell, publicado por primera vez en los EE.UU., en 2005, y del que se han vendido más de un millón de copias.
Lo que el Dr. John Kelly ha hecho es recopilar los hallazgos de su propia práctica médica de los últimos nueve años y documentar los resultados; parece ser el primer médico de medicina general que lo hace en esta parte del mundo.
El revolucionario libro del profesor Campbell estableció, hace una década, el vínculo entre la proteína animal y el cáncer de una manera tan convincente que era difícil de ignorar. Sin embargo, muchos profesionales de la medicina no lo tienen en cuenta ya que es una teoría demasiado simple como respuesta a lo que todos los especialistas siempre vieron como una enfermedad muy compleja.
Todo empezó cuando un amigo de Kelly le regaló un ejemplar de «El Estudio de China» de Campbell y quedó profundamente impresionado. En lugar de limitarse a leer el libro, decidió sacar sus propias conclusiones con los resultados de su práctica médica, lo que él mismo llama un «estudio de campo» entre sus pacientes con cáncer. Este médico ha estado haciendo esto durante casi una década y registrando los resultados meticulosamente.
Y dichos resultados son lo que detalla en su libro Dejar de alimentar a su cáncer, lo cierto es que son sorprendentes. Como pasa en las consultas de los médicos de medicina general de todos los países occidentales, varios pacientes de Kelly desarrollan cáncer cada año. Él comenzó a hablarles acerca de la posible relación entre proteínas animales y cáncer y les dio una copia de El Estudio de China, sugiriéndoles una dieta libre de proteínas de origen animal (sin carne ni productos lácteos). Al mismo tiempo, continuó enviándoles a los especialistas en cáncer como siempre y no trató de disuadirlos de los tratamientos convencionales como cirugía, radioterapia o quimioterapia.
Lo que sucedió fue ciertamente extraordinario. Todos los pacientes que adoptaron la dieta libre de proteínas animales y la aplicaron estrictamente descubrieron que su cáncer dejó de crecer y de diseminarse. Los tumores cambiaron a un estado latente, a veces incluso se redujo el tamaño.
Dado que todos estos pacientes también estaban teniendo el tratamiento convencional contra el cáncer, no era posible decir categóricamente que habían sido salvados por la dieta por sí sola. Pero sabemos que sólo el tratamiento convencional contra el cáncer no tiene esa tasa de éxito y en muchos casos los cancerólogos implicados quedaron sorprendidos por la recuperación del paciente. (Algunos de los pacientes de Kelly habían dicho a sus especialistas que estaban a dieta y otros no. Invariablemente, los especialistas defienden que la recuperación es gracias a la cirugía o la quimioterapia no a la dieta.)
Kelly da todos los detalles de más de media docena de sus casos en el libro, incluyendo los perfiles de los pacientes y sus estilos de vida. Se trata de personas con cáncer de próstata, pulmón, colon, intestino, cerebro y otros cánceres. En algunos casos, los pacientes siguen aplicando estrictamente la dieta; otros, tras una primera remisión volvieron a comer como antes, carnes y lácteos, y la consecuencia fue que sus cánceres regresaron.
Kelly es un doctor carismático y tranquilo de unos setenta años, un hombre varias décadas de experiencia como médico de cabecera en Irlanda. Hijo de un prominente psiquiatra, el Dr. Kelly estudió y trabajó en Irlanda, África y los EE.UU. antes de establecer como médico de cabecera en Dublín hace más de cuarenta años. Es considerado como una especie de gurú de la salud y del bienestar. Ahora, a punto de jubilarse, ha publicado este pequeño libro como resumen de lo que ha aprendido sobre el cáncer en los últimos años y de la visión limitada de la medicina especializada que está haciendo caso omiso de lo que él cree que es una forma efectiva de tratar una enfermedad mortal.
Kelly siempre ha adoptado un enfoque humilde con sus pacientes, como explica en el libro, animando sin presión alguna y dejando que cada uno tome sus propias decisiones. Las historias personales que él da son muy humanas ya que los pacientes tratan de seguir con la dieta, la enfermedad va y viene y los pacientes oscilan entre la desesperación y euforia. Los tratamientos invasivos se desarrollan al mismo tiempo que se intenta mantener la dieta. No hay dos casos iguales.
Su interés en la ciencia de la nutrición llevó al estudio personal de soluciones alternativas para el tratamiento del cáncer. Lo que los casos del Dr Kelly muestran en el libro es que una dieta libre de proteína animal puede vencer el cáncer.
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