Este postre mezcla fruta fresca con fruta caramelizada, a pesar de ser dulce tiene un cierto grado de acidez muy agradable, además, el crujiente de la hoja de brick completa un bocado de múltiples sensaciones.
Ingredientes:
(para dos cornetes)
- 2 hojas de brick
- 1/2 plátano
- 1 trozo de mango
- 1 naranja de zumo
- 1 naranja de mesa
- 1 puñado de granos de granada
- 1 kiwi
- 4 cucharaditas colmadas de azúcar moreno
- 1 cucharada de jarabe de arce
- 1 cucharadita de margarina
Preparación:
- Lo más fastidioso es hacer el cornete con una hoja de brick. Hay que doblar cada hoja casi por la mitad y hacer un cucurucho. Pintarlos con margarina por el exterior. Para que no se cierre al meterlos en el horno, yo me he ayudado de un molde circular metálico. Hay que hornearlos 10 minutos en el horno caliente a 200ºC.
- Pelar la naranja y separar los gajos de forma a que queden libres de su piel.
- Exprimir la otra naranja.
- Pelar y cortar el mango en cubos. Pelar y cortar el plátano en rodajas y luego en cuartos.
- Pelar el kiwi y cortarlo en rodajas. Separar los granos de una granada y guardar unos cuantos.
- En una sartén poner la margarina y, cuando empiece a derretirse, añadir el mango y el plátano.
- Tras darle unas vueltas, añadir el zumo de naranja, el azúcar y el jarabe de arce. Debe quedar como caramelizado.
- Las rodajas de kiwi sólo les doy una vuelta en la sartén y las saco. Ni los gajos de naranja ni los granos de granada deben calentarse.
- Rellenar los cucuruchos con la fruta caramelizada y acompañar con la fruta fresca.
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