La Nutriterapia es llamada a ser la Medicina del Tercer Milenio.

La medicina tradicional se basa en la lucha contra la enfermedad, gracias a medicamentos (anti-inflamatorios, antibióticos, hipo-tensores, antihistamínicos, ansiolíticos,….) y otras técnicas más o menos agresivas, como la cirugía, la radioterapia, la quimioterapia… Ese enfoque  de “guerra a la enfermedad” gracias a los medicamentos y a los avances de la medicina convencional ha aportado a la humanidad grandísimos beneficios.

Sin embargo, la evolución de las cifras publicadas por la salud pública muestran que, a pesar del éxito de los avances de la medicina,  el número de personas que sufren determinadas dolencias no cesa de aumentar. El alarmante aumento de la obesidad, de la diabetes, de trastornos del metabolismo, el incremento exponencial de las intolerancias y alergias alimenticias y de enfermedades inflamatorias. Los enfermos de cáncer que doblan cada 20 años. Además, gracias al aumento de la duración de la vida, el número de enfermedades degenerativas aumenta en igual proporción.

El consumo de medicamentos no es una banalidad

Los medicamentos que son tan beneficiosos para la salud humana también pueden ser igualmente perjudiciales. Sabemos que el abuso de antibióticos puede provocar resistencia ante determinadas bacterias, con un resultado que puede llegar a ser fatal. Otros medicamentos pueden provocar efectos secundarios tan graves como la enfermedad que tratan de aliviar.

Por otro lado, no hay que ignorar que a la industria farmacéutica sólo le interesa vender más y es una de las más poderosas industrias que existen y la venta de medicamentos es un verdadero negocio con miles de millones de Euros en juego. El informe “Guía de los 4000 medicamentos, útiles, inútiles o peligrosos”,  de los profesores franceses Philippe Even y Bernard Debré, publicado en 2012, dice que el 50% de los medicamentos comercializados son inútiles, el 20% son mal tolerados y un 5% son potencialmente muy peligrosos, sin embargo, todos esos medicamentos son reembolsados por el sistema de salud pública. Otras estadísticas indican que la media de medicamentos por persona en la tercera edad es de 6 medicamentos diferentes cada día. Muchos de esos medicamentos son necesarios para paliar el efecto de otros medicamentos.

No se trata de no utilizar medicamentos sino de hacer todo lo posible para no necesitarlos.

Nutriterapia es una palabra de origen europeo que describe el uso de la alimentación como medio para mejorar la salud. Se apoya en lo que dijo Hipócrates: «Que la comida sea tu medicina y tu medicina sea tu alimento». Lo que significa aportar a nuestro cuerpo la totalidad de los nutrientes adecuados para que pueda funcionar de forma óptima en todos los momentos de la vida y en toda circunstancia.

La Nutriterapia no trata sólo de dominar las herramientas de diagnóstico y de “guerra contra la enfermedad” de la medicina convencional sino de servirse de instrumentos de promoción de la salud. La búsqueda de la salud debe empezar por restaurar la energía, diagnosticar y corregir los desequilibrios alimentarios, los déficit nutricionales y las defensas inmunitarias gracias a técnicas a largo plazo, donde la comunicación y el acompañamiento personalizado juegan un papel fundamental.

Otros factores en los que se apoya la nutriterapia son el estudio de los factores medioambientales y su influencia en la salud y en la enfermedad.

A la excepción de algunas dependencias, como el alcohol y el tabaco, la mayoría de los médicos no están formados para tratar dependencias medicamentosas o alimenticias. La nutrición está prácticamente ausente de la formación médica convencional. La comunicación al paciente también está ausente del cursus médico.

Hay muchísimas personas que se quejan de fatiga, de estrés, son signos de falta de energía. La gran mayoría de los médicos no saben qué hacer cuando tienen ante ellos una persona estresada por culpa del trabajo. Si existieran especialistas en tratar esas dolencias, se ahorrarían miles de millones de euros en Europa, tanto en medicamentos como en bajas por enfermedad. Si tenemos en cuenta que el estrés va agravar o desencadenar muchas enfermedades graves, ¿por qué no existen especialistas en tratar la fatiga y el estrés?

La nutriterapia no es una medicina alternativa

La nutriterapia tiene sus fundamentos en la bioquímica y busca su aplicación práctica basándose en estudios científicos y epidemiológicos.

«La medicina medicamentosa debería ser un apoyo de la nutriterapia, es decir actuar con medicamentos cuando las soluciones naturales no consiguen combatir la dolencia, y no lo contrario.»

La nutriterapia reposa, en gran parte, en la modificación del comportamiento alimentario, pero además, se puede acompañar por técnicas de respiración, de ejercicio suave regular, de la gestión del estrés, técnicas para aprehender la vida de forma positiva para vivir-mejor. Apreciar el placer de las cosas sencillas. El placer es un componente fundamental del tratamiento curativo. El placer se aplica a nuestro entorno y a nuestra alimentación. Vivir en un ambiente sencillo, acogedor y agradable, alimentarse apreciando los alimentos con los cinco sentidos.

La nutriterapia tiene un poder considerable de prevención de la enfermedad, sin embargo, es prácticamente desconocida o ignorada por el cuerpo médico. La nutriterapia busca alargar la vida con buena salud, prevenir la enfermedad, mientras que la medicina tradicional busca mantener a las personas enfermas con vida lo máximo posible.

Prevenir antes que curar

La nutriterapia busca la salud gracias a la prevención, trata de identificar los riesgos y tratarlos antes de que la enfermedad aparezca. La nutriterapia acompaña al paciente, analizando su progresión a largo plazo y sensibilizando al paciente sobre su propia progresión.

Cuando el objetivo es tratar una patología, la nutriterapia utiliza:

  • Técnicas para favorecer el cambio del comportamiento alimentario.
  • El diagnóstico y la corrección de déficit nutricionales.
  • El poder farmacológico de los alimentos, vitaminas, minerales, ácidos grasos, ácidos aminados y fitonutritientes.

La nutriterapia busca optimizar  las funciones corporales:

  • La energía.
  • El peso y la composición corporal.
  • La solidez del esqueleto, las articulaciones, los tendones.
  • Las funciones digestivas, de la absorción de los nutrientes, del metabolismo y la eliminación de los residuos.
  • Las defensas, el sistema inmunitario en general.
  • De protección anti-inflamatoria.
  • De modulación hormonal.
  • De reproducción (fertilidad masculina, femenina, condiciones del embarazo y del parto)
  • La detóxificación.
  • La reparación celular.
  • Crecimiento físico y desarrollo cerebral.
  • Capacidad física e intelectual.
  • Resistencia al estrés.
  • Capacidad de concentración, del humor y capacidad de decisión y adaptación.
  • Retardar el envejecimiento y la búsqueda de la longevidad con buena salud.

Otro de los objetivos mayores de la nutriterapia es la prevención de las alteraciones.

  • Prevención de la alteración de las células con capacidad reproductora.
  • De las patologías infecciosas, alérgicas o crónicas.
  • De las enfermedades degenerativas.
  • Reducir el consumo de medicamentos y procedimientos médicos innecesarios, así como sus efectos secundarios.
  • Compensación de los efectos anti-nutricionales y factores protectores frente a tratamientos médicos agresivos.

La nutriterapia sirve como apoyo de otras técnicas médicas como la cirugía, quimioterapia, radioterapia, psicoterapia, etc. Ya que los alimentos y los nutrientes poseen efectos farmacológicos que permiten reducir las dosis de determinados tratamientos y de sus efectos secundarios. También estudia las interacciones entre determinadas moléculas químicas utilizadas en los medicamentos y sus interacciones con los alimentos.

Los medios de la nutriterapia

  • La alimentación: el conocimiento de los alimentos y sus propiedades nutricionales, las interacciones entre ellos. Recomendar alimentos buenos para remplazar otros nocivos o desaconsejables.
  • La dietética mejorada. La dietética actual hasta ahora era puramente restrictiva. Los regímenes a corto plazo tienen muy poca utilidad).
  • Consejos nutricionales. Hasta ahora han tenido una efectividad casi nula, ya que el comportamiento alimentario es afectivo y los consejos no pueden ser sólo verbales. Se trata de introducir progresivamente cambios comportamentales que se mantendrán a largo plazo, nuevos hábitos. Esto se consigue gracias a técnicas de cambio comportamental que debe apropiarse el paciente. Se trata de consejos positivos, resaltando lo que se va a ganar, el beneficio que se va a conseguir.
  • Los complementos nutricionales: vitaminas, minerales, ácidos grasos, ácidos aminados, substancias fitoquímicas.
  • Medios complementarios: técnicas corporales de energización, tai-chi, yoga, qi-gong, masajes, estudios medioambientales, medicina osteopática, curas termales, técnicas de gestión del estrés, etc.

 

Referencias:

(1) Seminario « La nutrithérapie, les bases », Dr Patrick Chavaux. S- Institut Européen de la Nutrition e Phytothéraphie Appliquée IENPA  [publicado en 2012, consultado en julio 2013]
(2) «Sólo un medicamento de cada tres es eficaz de verdad«, del profesor y ex-miembro de la comisión científica del Ministerio de Sanidad francés Philippe Even. (Corbis), artículo El Confidencial [publicado en 2012, consultado en julio 2013]

Una Respuesta

  1. CARLOS

    quisiera saber mas, sobre la nutriterapia.

    seria posible ??

    muchas gracias !!

    carlos